Los problemas de audición son bastante comunes en casi todo el mundo y, más de 400 millones de personas tienen niveles de hipoacusia que causan discapacidad. Solamente en España, se estima más de un millón de personas con discapacidad auditiva, de las que más de 10.000 usan el lenguaje de signos.
La ley obliga a garantizar la máxima accesibilidad a las personas con algún tipo de discapacidad, incluido su entorno laboral. Por tanto, es necesario tomar algunas medidas en las empresas, a fin de adaptar los espacios y herramientas de trabajo para las personas con hipoacusia.
En general, se pueden tomar medidas muy sencillas, como cambios de ubicación en la oficina o en las reuniones de trabajo. Otras llevan a cambio en el diseño y distribución de los espacios o mejorar la señalización, de tal forma que las personas sordas tengan una mayor accesibilidad y un ambiente laboral más favorable.
¿Qué es la accesibilidad auditiva?
Es necesario manejar el concepto de accesibilidad en sentido amplio, que se refiere a la posibilidad de que cualquier persona utilice servicios, productos y edificaciones en condiciones de igualdad. La intención de esto, es que la presencia de una discapacidad, no sea una limitante para tener los mismos derechos ciudadanos que las otras personas.
En particular, la accesibilidad auditiva tiene que ver con la adaptación de distintos espacios y objetos, a fin de que sean usadas sin limitaciones por personas con hipoacusia. Para esto, se deben usar todas las herramientas disponibles, que faciliten la comunicación tanto en formato visual como táctil.
Algunos de los aspectos que se contemplan en el diseño de entornos que brinden accesibilidad auditiva, son los siguientes:
- Toda la información que se ofrece al usuario en forma oral, también se debe presentar de manera visual. Así, se facilita el acceso a las personas con discapacidad auditiva.
- Contar con intérpretes de lenguaje de signos, para ayudar a las personas que usan este recurso, a comunicarse en diferentes ambientes.
- Hacer uso de bucles magnéticos, los cuales contribuyen a crear un mejor entorno para las personas que utilizan audífonos para sordos.
- Uso de señales luminosas, que contribuyan a guiar a las personas con hipoacusia en casos de emergencia y otras situaciones de riesgo.
- Contar con teléfonos que tengan amplificador, permitiendo que los usuarios con discapacidad auditiva puedan comunicarse.
- Diseño de edificaciones que favorezcan una mejor distribución del sonido, así como la comunicación visual.
¿Qué dice la ley de accesibilidad para personas con discapacidad?
Las personas con discapacidad están protegidas por la legislación española desde la Constitución. En la misma, se establece que todos los ciudadanos españoles son iguales ante la ley y las instancias públicas deben buscar las vías para garantizar su accesibilidad.
En este sentido, se cuenta con la Ley General de derechos de las personas con discapacidad y su inclusión social. La misma fue aprobada el 29 de noviembre de 2013 y presentada en el Real Decreto Legislativo 1/2013, con su última modificación en el Real Decreto 6/2022.
Algunos de los aspectos que contempla la ley, asociado a la accesibilidad universal, son las siguientes:
- En su artículo 22, se señala que las personas con cualquier discapacidad tienen el derecho a vivir de manera independiente y tener participación plena en todos los aspectos de la vida.
- El artículo 23 contempla que los edificios y entornos, así como tecnologías, bienes y productos, deben cumplir las exigencias de accesibilidad.
- Las edificaciones deben cumplir con una normativa mínima, para garantizar el acceso y uso de los espacios a las personas con cualquier discapacidad. Estas medidas deben estar contempladas en los proyectos de construcción o remodelación.
- Las oficinas públicas deben disponer de los elementos que garanticen la accesibilidad de las personas con discapacidad, para una correcta atención al ciudadano.
Por otra parte, la Ley 27/2007 indica que la lengua de signos española es reconocida y se debe fomentar el aprendizaje de la misma. Asimismo, se debe contar con medios de apoyo, que faciliten la comunicación oral a las personas con hipoacusia.
También, cada Comunidad Autónoma establece normativas propias, que facilitan la accesibilidad a personas sordas. Entre estas, destaca la de Galicia, donde se establecen parámetros de señalización, que favorezca la visualización en cualquier condición a las personas con discapacidad.
¿Cómo ser una empresa con accesibilidad para personas con discapacidad auditiva?
Las empresas tienen un importante reto a fin de garantizar a todos sus empleados, una plena accesibilidad en su ambiente laboral. En muchos casos, se toma en cuenta el aspecto de movilidad para personas que se mueven en sillas de ruedas o para aquellas con problemas de visión.
La discapacidad auditiva suele dejarse un poco de lado, pero la legislación indica que se debe respetar el derecho de todos los ciudadanos. Como nos indican en Audifonos-Madrid.com, la hipoacusia afecta la calidad de vida, por lo que se deben brindar todos los recursos posibles, para que estas personas desarrollen su actividad laboral de forma plena.
En este sentido, hay acciones sencillas, que se pueden tomar en las empresas y dar mayor accesibilidad a las personas con discapacidad auditiva:
- Contar con un entorno en el que no se perciban ruidos fuertes, los cuales pueden afectar la audición de personas sanas. Además, dificulta a las personas con audífonos o implantes cocleares, captar los sonidos con claridad.
- Ubicar a las personas con discapacidad auditiva lo más lejos posibles de algunos aparatos, como aires acondicionados, electrodomésticos o lámparas. Estos pueden interferir en el uso de dispositivos para mejorar la audición.
- Cuando se diseñan los edificios de oficinas, cuidar la acústica, con la finalidad de que el sonido se desplace y se capte mejor.
- Mantener un equilibrio correcto entre los materiales que reflejan el sonido (revestimientos metálicos, cemento, vidrio) y aquellos que lo absorben (madera, corcho, fieltro u otros).
- El vidrio es un elemento que favorece la comunicación visual, cuando se usa para separar espacios. No obstante, al reflejar casi todo el sonido, conviene combinarlo con elementos absorbente o colocar mamparas de cristales dobles.
- Usar mobiliario que no tengan superficies que deslumbren, ya que dificulta la comunicación visual a las personas con discapacidad auditiva.
- Colocar protectores en las patas de muebles de metal (sillas y mesas), a fin de que no hagan ruido excesivo al moverse. Esto puede dificultar la audición de las personas con hipoacusia.
- En aquellas puertas en las que sea posible, colocar mirillas, para facilitar la comunicación visual.
- Cuando se organicen reuniones, hacerlo en mesas redondas u ovaladas, para que todos los participantes pueden verse unos a otros. Las personas con discapacidad auditiva, mejoran su capacidad de comprensión al ver los labios de su interlocutor.
- En caso de estancias muy amplias, se recomienda colocar espejos que ayuden a la persona a visualizar más fácilmente el entorno a los compañeros de trabajo.
- Cuando se tenga señales sonoras para cualquier actividad laboral, se debe complementar con señales luminosas, que adviertan al empleado con hipoacusia.
- Si los empleados reciben información auditiva, necesarias para realizar sus labores, se debe presentar también por escrito. En estos casos, acompañar, cuando sea posible, con imágenes que ayuden a su comprensión.
- Usar micrófonos que amplifiquen los sonidos, los cuales deben ser de calidad, a fin de transmitir un sonido nítido. Serán útiles principalmente para las personas que utilizan audífonos para sordos.
- Señalizar correctamente todos los recursos de accesibilidad que están diseñados para la discapacidad auditiva.