Con el avance imparable de las nuevas tecnologías se está abriendo día a día un abanico de posibilidades en el desarrollo de aplicaciones para las mismas, y en concreto para las relativas a los Smartphones (apps).
Es legítimo que quien se toma el trabajo de desarrollar una app, lo afronte para generar ingresos que le compensen el esfuerzo en creatividad y la inversión de tiempo en sacarla adelante y lograr situarla entre las primeras del volátil mercado tecnológico. Bien, pero ¿de qué métodos o sistemas se sirve su creador? Son conocidas varias posibilidades que a continuación os mostramos.
Los beneficios de la publicidad In-App y las compras en apps móviles se han incrementado en un 70% de 2013 a 2014, y se estima que en los próximos años ese porcentaje se triplique.
Diversos tipos de descarga de apps:
- La descarga libre y gratuita con posibilidades de compra una vez descargada, mediante mejoras que la hacen más atractiva al usuario.
- Las que se efectúan mediante un pago único y previo a la descarga.
- Y por publicidad incluida en la app.
Publicidad in-app
Este último apartado es del que vamos a tratar y analizaremos sus variantes y derivaciones, así como los posibles inconvenientes a superar por el desarrollador.
Todos recordamos las primeras experiencias en los juegos online, o aquello que se dio en llamar spam. La saturación de publicidad invasiva que estorbaba la visión de la página web, mediante banners de colores llamativos y flashes emergentes comunicando que nos había tocado un premio o peor, que habíamos sido seleccionados para un sorteo, ¡horror! Todo esto, la basura cibernética, está siendo superado felizmente e imponiéndose aquella publicidad que respeta el gusto del público a la cual va dirigida, que obviamente es coherente con el tipo de app donde está incluida.
El ejemplo más palmario es la app de las carreras de coches de Fórmula 1, su publicidad es mayormente de vehículos o de funcionalidades de los mismos, aprovechando además aquella que es contratada en los propios vehículos de competición y la publicidad pasiva de las vallas de los circuitos. Yo la denominaría publicidad elegante, por lo sutil e inevitable que parece al mismo tiempo, ya que luce al mismo nivel que algunos míticos coches.
¿Cómo olvidar aquel Marlboro en blanco que aprovechaba el rojo característico de los Ferrari? El ejemplo anterior es parecido a los publirreportajes que los periódicos de papel ofrecen en ocasiones determinadas, como procesos electorales (programa de un partido político) o aprovechando el número extra lanzado por un determinado evento de alcance internacional, (juegos olímpicos…) añadir reportajes publicitarios sobre la implantación de las marcas de equipación deportiva en determinados países, solo que en un formato mucho más moderno.
Otra variante a considerar, es aquella clase de publicidad que aprovechan las compañías telefónicas para enviar al mismo tiempo que informan del saldo de que dispone el usuario o de la renovación mensual del número de megabytes para descarga de datos. Normalmente esta se efectúa mediante la expansión multimedia, con video y sintonía musical de la marca telefónica, también es admisible, porque es una publicidad que interesa especialmente al usuario, dado que le actualiza el uso del aparato en cuestión, o últimas tendencias de la marca.
Inconvenientes en el lanzamiento publicitario
Pero como apuntábamos en párrafos anteriores, existe una serie de inconvenientes en el lanzamiento publicitario, que es extrapolable a distintos soportes, incluidas las apps para smartphone, de los que vamos a señalar algunos.
No incitar a clicar en los anuncios bajo ningún pretexto que influya en el desarrollo de la aplicación.
Por supuesto, desterrar la posibilidad de hacer esperar al usuario un tiempo determinado, que casualmente suele coincidir con el video multimedia publicitario.
No situar banners junto a los controles de la aplicación, ni junto a las opciones del menú de la misma, simulando ser parte de dicho menú.
Tener en cuenta al imponer la publicidad, si la app se utiliza de manera horizontal o vertical en el móvil, o si le influye que el aparato esté al sol o a la sombra.
Todos estos inconvenientes se solucionan si hay comunicación correcta y comunidad de intereses entre agente publicitario y desarrollador de app.
Diversificar la oferta y obtener lecciones
Por tanto, la conclusión de todo esto, es que solo estamos empezando. Que la diversidad de formatos que se ofrecen al técnico y al usuario en forma de blog, red social, app para móvil o tablet permiten diversificar la oferta y obtener lecciones aprendidas que facilitan evolucionar tanto en su desarrollo como en la superación de los hándicaps que, una vez por la dificultad tecnológica y otras por el afán de monetizar la aplicación antes de tiempo, complican y echan a perder su comercialización.